Teníamos tiempo sin volver con la Entrevista del Mes, así que aprovechamos para conversar con un jugador muy querido y recordado en su paso por Torrejón de Ardoz: El alero colombiano Jhan Paul Mejía, que es uno de los cinco jugadores desarrollados en el Javi Limones que ha llegado a NCAA D-1. Conocemos más del gigante de 2.07 metros de altura en estas líneas:

Describe a Jhan Paul, el jugador, y también fuera de la pista con breves palabras:

Muy espontáneo, trato de cumplir y hacer lo que le pueda hacer falta en el equipo en ciertas facetas. Fuera de la pista, muy apegado a los míos, estar con mi familia, mis amigos/compañeros.

¿Dónde empieza tu pasión y camino en el mundo del baloncesto, Jhan?

Mi papá es el culpable. Estaba creciendo sin parar con 14, 15 años y un día volviendo a casa me dijo: el martes tienes entrenamiento de baloncesto (risas) y a partir de ese día le fui cogiendo cada vez más gustillo a este deporte. 

Para los que no te han visto jugar, ¿cuál es tu estilo de juego? ¿Tus virtudes en la pista, tu skill set?

Diría que hago un poquito de todo (entre las posiciones 3 y 5). Mi fuerte es el tiro y jugar por encima del aro.

Háblanos de tu formación en T B S:

Estuve un año y medio hasta que viajé a Colombia a terminar de educarme y seguir formándome, pero fue el año más clave en mi formación. James me dio la oportunidad al ver que las cosas no terminaban de cuajar en mi paso por el Estu y gracias a ello tuve uno de los años más bonitos de mi carrera.

¿Cuánto tiempo estuviste en la academia? Fuiste parte de algunos equipos y momentos históricos…

Estuve mi año de Júnior de 2do año y mitad de temporada con el 1ra Nacional. En Júnior hicimos un año muy bueno, empezando por el Campeonato de Madrid, pasando por el torneo internacional de Cholet, en Francia, y haciéndolo muy bien el Campeonato de España Júnior después.

¿Qué recuerdos tienes de algunos de esos equipos en particular? ¿Jugadores talentosos y amigos que siempre tengas presente?

El grupo que teníamos es un grupo que muy difícilmente se puede volver a tener. No solo hice amigos a los que llamé familia, sino que era un grupo muy talentoso de jugadores de los cuales algunos se ganan la vida con el baloncesto. James es gran culpable de todo este bonito caos.

Cuéntanos sobre tu salto a Estados Unidos y esa experiencia en general.

Una de las mejores experiencias de mi vida. Mis dos primeros años, en especial el segundo, fueron los mejores de mi carrera. Es un mundo completamente diferente en el cual se invierte mucho a la formación tanto académica como atlético de los deportistas. Los últimos dos años fueron más difíciles, pero hoy en día los veo como una gran enseñanza que me ayudó mucho a madurar como jugador y como hombre.

¿Cómo va el año profesional en E B A? ¿Qué perspectivas tienes?

Ahora estamos pasando por un bache el cual estamos trabajando para salir de el, pero tenemos una plantilla para ser de los mejores equipos de toda la Liga EBA. El principal objetivo es el ascenso. Ahora mismo los resultados no acompañan esa meta pero la liga es muy larga. Solo tenemos que volver a la dinámica del principio y va a ser muy difícil ganarnos.

¿Volver a la selección Colombia es un sueño para ti? ¿Has podido seguir los partidos a lo lejos, de esta ventana FIBA?

Por supuesto, siempre es una motivación y un orgullo poder vestir la tricolor. Aun sigo en “dinámica” de ser convocado entre los 20. Solo hay que seguir trabajando más duro y algún día volverá esa oportunidad. Pude ver el primer partido el cual competimos bastante contra la Uruguay de Fitipaldo y Batista. Pero aun falta trabajo.

¿Cómo ves el estado del básquet colombiano en general, sus talentos top? ¿Qué se tiene que hacer para mejorar su estructura y que destacas que se hace bueno ya?

Es un país que sobra de talento pero carece de apoyo. Hay talentos de sobrenombre como Jaime Echenique que es un orgullo ver su papel este año en la G-League, Braian Angola el cual se llega a rumorear su fichaje por el Barça, Tonny Trocha el cual esta teniendo un temporadón en Bulgaria y podría seguir nombrando talentos. Al final, la propia liga profesional dispone de 8-10 equipos y se juega 2 veces al año durante 2 meses máximo, con esto no se puede llegar con buen ritmo a competir a nivel internacional, el país no se puede llegar a conocer mundialmente. Es cierto que estos dos últimos años el nivel de la liga ha subido bastante pero también se debe a la incorporación de mucho extranjero lo que disminuye mucho la oportunidad a los jugadores criollos.